Risas
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La risa es una de las experiencias que compartimos más contagiosas y gratificantes. Esta serie surge de mi deseo de evocar de manera sutil y a través de mi pintura, un sentimiento de alegría igualmente placentero.
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Creo que estamos constantemente influenciados por todo lo que nos rodea. La fusión de diferentes estímulos visuales como gestos, colores y movimiento nos afecta de manera poderosa, aunque subliminal.
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Me inspira la fuerza de la figura femenina y el cómo se entrelaza en la mujer sus diferentes tonos de piel con la belleza vibrante del color. Mi siempre presente fascinación con los tejidos estampados y sus infinitas posibilidades me permiten proyectar todo un universo que llena mis lienzos de colores vitales, motivos y texturas que se entremezclan para transmitir en el movimiento una emoción festiva.
Para mi trabajo he usado oleo como medio principal. Su flexibilidad y naturaleza generosa me ayudan a seguir un proceso lento y meticuloso, donde a través de interminables retoques busco de manera obsesiva ese "Por siempre Felices", así sea solo en el lienzo.
La risa me empodera y genera, a través de mi pincel, un mundo paralelo lleno de estímulos con capacidad de transformación, en la utópica búsqueda de la mejor de mis versiones.
Mis sentidos se funden durante el proceso creativo. En un Deja Vu continuo evoco imágenes de momentos perfectos, quizás vividos, tal vez soñados. Símbolos que parecen recuperar recuerdos de fragancias, luces, reflejos... en una sensación cálida y envolvente.
La pintura me proporciona una resiliencia interior, me concede la oportunidad de crear, de elegir, de controlar. Es mi manera de combatir los infinitos grises que se presentan diariamente. Es mi grito alto y claro por medio del color, del gesto, de una risa intima que conjura un anhelo de la vida soñada. Es la búsqueda de esa carcajada espontánea, sanadora, que me transforma, me renueva, me da vida.
Cada pieza es un escaparate único, un "Viva la Vida" lleno de pinceladas que reflejan un largo proceso de elaboración orquestado por todos los pequeños detalles que comprenden esta colección. Y en donde el componente humano es con su gesto el protagonista de la naturaleza efímera de la risa, que no necesita más complicidad que la propia para ser interpretada.